Nuestra alimentación está comprendida por frutas, carnes, harinas, granos, entre muchos otros tipos de alimentos, algunos de ellos producidos de forma orgánica, es decir sin ningún tipo de agroquímico, mientras que otros están plagados de ellos, debido a factores como las condiciones climáticas que favorecen a los insectos, la gran variedad de plagas que atacan los cultivos entre otras características.

En nuestra cocina generalmente hervimos los alimentos, pero algunos como las frutas se consumen de manera inmediata sin ningún otro tratamiento más que lavarlos o pelarlos, pero ¿esto ayuda a disminuir los agroquímicos o agrotóxicos que tienen estos alimentos? Un estudio de la Asociación Francesa de Cosnumidores Que Choisir comprobó qué cantidad de pesticidas siguen en las frutas cuyos cultivos son regados con agroquímicos. La Organización tomó muestras de manzanas durante septiembre de 2016 para aislar molécilas provenientes de los pesticidas, dividió las muestras en tres:  frutas enteras sin lavar, frutas lavadas (con agua durante 10 segundos) y frutas lavadas y peladas.

Luego de todos los análisis los resultados son alarmantes: moléculas de más de 500 pesticidas se hallaron en la fruta y, luego de lavar y pelar, se redujeron en menos de la mitad. En el experimento se encontraron un promedio de 9 moléculas de diferentes pesticidas en la fruta sin lavar y 8, luego de lavarla. Una vez pelada, quedaron aun seis moléculas. En porcentajes, esto significa que lavar la fruta solo disminuyó los pesticidas en un 12 %, y pelarla entre un 30 y un 40 %.

Pero el estudio no solo analizó frutas de cultivos convencionales (con agroquímicos o agrotóxicos) sino también 150 muestras de manzanas, peras, fresas y uvas que incluían muestras de cultivos orgánicos, los más de 500 pesticidas fueron hallados en los cultivos convencionales, que son los más comunes en almacenes y supermercados.

¿Cuál es la razón de que los pesticidas sigan en la fruta?

Los analistas creen que los pesticidas no fueron eliminados por ningún método porque los químicos se están aplicando en el recubrimiento de las semillas o en el suelo. Esto causa que el tóxico penetre en la planta, y luego se conserve en la fruta.

Además, señalaron los especialistas, los plaguicidas de contacto son difícilmente solubles en agua. Es por eso que lavar la fruta casi no ayuda a eliminarlos (de todas formas es necesario, porque elimina bacterias que la fruta haya adquirido en todo el camino que recorrió hasta llegar a nuestras manos).

Lavar y pelar la fruta son las únicas acciones a nuestro alcance para «desinfectarla», es decir que no podemos eliminar de ninguna manera el porcentaje de químicos que se encuentran dentro de ella. Comprar orgánico o cultivar en casa son las únicas maneras seguras de evitar los pesticidas.

Fuente: EcoPortal.